JÉRÉMY BARBAY

1. Introducción

Durante la visita de Ela Gandhi a Santiago de Chile para recibir el Premio Nueva Civilización 2017, Univérsitas Nueva Civilización organizó un taller de tres días en torno a los desafíos principales que enfrenta hoy la humanidad.

Después de algunas hesitaciones debidas a que mi carrera académica en el campo de la teoría de la computación no me califica para opinar sobre los "desafíos enfrentados por la humanidad", decidí que mi calidad de ser humano y mis inquietudes sin fin sobre el devenir de esta especie, sí me calificaban para participar, y que tal participación me podría poner en contacto con personas que comparten mis inquietudes.

En mi contribución intento separar algunos desafíos visibles, comentados frecuentemente por los medios, de aquellos desafíos raíces, mucho menos expuestos por los medios aunque potencialmente estén en el origen de los desafíos visibles. Finalmente, describo algunas estrategias que a mi parecer pueden contribuir a enfrentar ambos tipos de desafíos, siempre con el objetivo de maximizar el período de supervivencia de la humanidad o de cualquier evolución de ella, en nuestro planeta y en el universo.

2. Desafíos visibles

En el año 2017, el tono principal del discurso general representado por los media sociales, medios de información y publicaciones diversas, ha sido de miedo hacia el futuro, relacionado con un potencial cambio climático, guerras presentes o potenciales y pandemias probables (ej. gripe aviar). Cada uno de estos temas presenta un desafío real para la supervivencia de la humanidad.

2.1. Cambio Climático

El cambio climático ha sido un asunto que inquieta desde el siglo dieciocho. No obstante, aunque han existido movimientos para combatirlo, los esfuerzos científicos y políticos han sido poco efectivos, y hemos visto un aumento progresivo en la frecuencia de los incidentes de clima extremo, como huracanes y tornados (ej. Katerina, …) además de sequías repetidas y extendidas (África del Norte, América del Sur, etc.).

Considerando no solamente el daño directo de los incidentes climáticos, sino también el daño indirecto sobre la producción de comida (cereales consumidos directamente por humanos, o comidos por animales que, a su vez, son consumidos por humanos), sobre las condiciones de vida (ciudades de la costa destruidas por la subida del nivel del mar) y las migraciones masivas resultantes, el cambio climático es un desafío mayor para la supervivencia de la humanidad.

2.2. Guerra, real y presente y/o potencial y futura

Los conflictos armados están de nuevo de actualidad, ya sea el riesgo de tener un conflicto entre Estados Unidos y Corea del Norte, o entre los Estados Unidos y Rusia; o los conflictos ya existentes entre Estados Unidos y Siria, y en África; o los conflictos por venir, consecuencias de las migraciones generadas por los cambios climáticos ya efectivos. Considerando la proporción creciente de civiles muertos en los conflictos armados del pasado reciente, el desarrollo de armas autónomas, y la proliferación renovada de armas nucleares, el riesgo de un(os) conflicto(s) masivo(s) es un desafío mayor para la supervivencia de la humanidad.

2.3. Riesgo de Pandemia

En una sociedad humana conectada como ninguna anterior, el riesgo de que una pandemia que pudiera afectar a una proporción grande de la humanidad en un corto periodo de tiempo se ve mayor que nunca. En este línea experimentamos el miedo recurrente de una gripe aviar, y viene ahora el miedo de bacterias resistentes a los antibióticos, una consecuencia lógica del uso intensivo de antibióticos en la crianza de animales para la producción de carne, huevos y leche. Considerando que la peste negra mató a un quinto de la población de Europa en un lapso de tiempo de unas pocas decenas de años, el impacto de una pandemia sobre una sociedad aun más conectada es un desafío mayor.

De estos desafíos intensamente representados en las noticias diarias (cambio climático, conflicto armado, y pandemia), ninguno es menor o menos urgente, y ya son suficientes para motivar reacciones fuertes: ¡no se necesitan más desafíos! No obstante, ya está siendo evidente que estos desafíos "visibles" interactúan (ej. el cambio climático precipita algunos conflictos armados, y facilita pandemias; mientras los conflictos armados impiden reacciones apropiadas al cambio climático y a las pandemias, etc.), y existe la posibilidad de que varios desafíos tengan raíces comunes, menos visibles pero que vale la pena explorar, de manera de atacar las causas de estos desafíos, y no solamente los síntomas: es lo que intento explorar en la siguiente sección.

3. Desafíos raíces

La urgencia de los desafíos descritos en la sección anterior podría motivar que se ignoren otros desafíos a más largo plazo, que parecen menos urgentes. Aunque en una situación con recursos finitos sea necesario priorizar los problemas a resolver, eso no implica ignorar los menos urgentes, sino considerarlos y después eventualmente decidir si asignar recursos a su resolución o no, en particular porque podría ocurrir que algunos de estos desafíos "menos urgentes" se encuentren en la raíz de los problemas más urgentes, y que resolverlos resolvería no solamente las ocurrencias presentes de los desafíos presentes, sino también sus instancias futuras. En este ensayo se consideran tres de tales desafíos (extinciones de especies, decisiones erróneas con impacto masivo, y elección de modelos de coordinación, incluso del modelo de gobierno) que la humanidad ha enfrentado por mucho tiempo (por lo cual uno podría clasificarlos como no tan urgentes), pero que podría valer la pena considerar en relación en los desafíos más urgentes descritos en la sección anterior.

3.1. Extinciones Masivas (Anthropoceno)

Desde los dinosaurios al dodo, la desaparición de especies es natural y parte integrante del proceso de evolución. Los historiadores han identificado varias especies cuya extinción tuvo causas humanas, aunque sin un impacto mayor sobre la capacidad de sobrevivir de los humanos. No obstante, la era actual ha sido llamada el "Anthropoceno" por la cantidad masiva de extinciones causada por varias actividades humanas, con un énfasis en el riesgo que corre la humanidad si demasiadas especies de su entorno llegaran a desaparecer. En particular, un incidente reciente en los últimos años llamó la atención sobre la importancia de algunos insectos (ej. las abejas) en el proceso de polinización de las plantas, incluidas en particular las cultivadas para el consumo humano, directo e indirecto. Cuando las colonias de abejas desaparecen, se teme por la capacidad de reproducción de las plantas.

Dada la cantidad de especies ya desaparecidas o en peligro de extinción, es posible y probable que aparezcan otros problemas relacionados con la desaparición de una(s) de la(s) cual(es) la humanidad depende más de lo que se sabe, presentando otro desafío mayor a la supervivencia de la humanidad, incluso de especies menos visibles (ej. se postuló que la reducción masiva de la diversidad en la flora intestinal de los humanos de sociedades "civilizadas" podría indicar una extinción masiva de algunas bacterias útiles y/o esenciales).

3.2. Consecuencias no deseadas

En paralelo con la unificación de las sociedades y culturas humanas, el impacto de las decisiones económicas, sociales y legales ha crecido hasta llegar a niveles nunca antes vistos. Muchas de estas decisiones han tenido consecuencias que benefician a la supervivencia de la humanidad (ej. colaboraciones científicas internacionales, intercambios de recursos minerales, alimentos y productos entre entidades, etc.), y algunas pocas erróneas fueron corregidas antes de llegar a consecuencias fatales para la humanidad (ej. la destrucción progresiva de la capa de ozono; la recomendación del consumo de tabaco por los médicos; el uso de insecticidas destruyendo insectos necesarios a la polinización; uso obligatorio de retardadores de fuego causando deficiencias en yodo, que a su vez afecta el desarrollo de los fetos humanos; etc.). No obstante, a medida que la sociedad humana se vuelve más conectada y unificada, el impacto de cada decisión (centralizada pero de impacto global) se hace más grande, y requiere más precauciones (ej. el uso de Organismos Modificados Genéticamente; el desarrollo de armas autónomas controladas por inteligencia artificial; el desarrollo de drogas psicotrópicas, usadas tanto como medicinas que como métodos de control del comportamiento de la población). Desarrollar sistemas de controles fiables (se trata de riesgos globales sobre la supervivencia de la humanidad) y escalables (las decisiones afectan una proporción siempre creciente de la población humana global) es un desafío que nunca ha sido resuelto hasta el momento presente, y cuyas fallas amenazan la supervivencia de la humanidad más que en las épocas previas.

3.3. Procesos Colectivos de Decisión (Gobiernos y Economía)

Un desafió muy antiguo de la humanidad ha sido cómo organizarse como sociedad, dejando hasta nuestros días una gran variedad de modelos políticos (de monarquías, democracias, repúblicas y oligarquías, en varios casos mezcladas), económicos (mercado dicho "libre" o "regulado", en varias combinaciones y conjuntos de compromisos, y economías "planificadas"). Elegir un modelo social, económico o gubernamental puede parecer elusivo y no tan de actualidad como los desafíos descritos previamente, pero al contrario, el proceso colectivo de decisión puede ser clave en la solución de los problemas globales ya descritos: la contaminación ambiental (ej. la destrucción de la capa de ozono), preparaciones contra el riesgo de pandemias, y otros desafíos son problemas globales esperando soluciones globales. Mas aún, tales problemas tienen su origen en el comportamiento de una minoría de la población humana, y afectan a la totalidad del planeta (dentro del cual habita la población humana): un proceso de adjudicación global es esencial para detener tal proceso y evitar que se repita.

Apuntar desafíos y problemas sin proponer soluciones sería un ejercicio frustrante y poco útil. Sin pretender resolver todos los problemas del mundo, en la sección siguiente intentamos delinear algunos puntos importantes para cualquier estrategia que apunte a resolver los desafíos previamente descritos.

4. Perspectivas para al futuro

Las seis familias de desafíos descritos previamente (cambio climático, conflictos armados, pandemia, extinciones masivas, errores con consecuencias masivas, corrupción de los sistemas de gobiernos) pueden, y deberían, asustar: son desafíos grandes, a escala de una especie entera, de un planeta. No obstante, la primera causa del tamaño de estos desafíos queda en el tamaño del espacio y del rol que ha tomado la especie humana en el planeta, de su éxito en sobrevivir, propagarse y desarrollar nuevas estrategias y herramientas. En este sentido, se pueden encontrar soluciones parciales dentro de los mismos problemas.

4.1. Aprovechar los movimientos migratorios

Ya sea por eventos climáticos mayores o por conflictos armados, cambios grandes en los movimientos migratorios ya se iniciaron. Uno de estos cambios es bien cualitativo: que sean los refugiados sirianos llegando a Europa o haitianos y venezolanos inmigrando a Chile, no son gente pobre con poca educación huyendo de su patria en busca de mejores condiciones económicas (como descrito por el estereotipo del inmigrante tradicional), sino en gran parte gente con educación y talentos útiles a la sociedad, huyendo de condiciones civiles y climáticas (y no directamente económicas). Los países que sabrán aprovechar de este flujo de inmigrantes altamente calificados, tendrán ventajas económicos y sociales sobre otros en las décadas por venir. Países con grandes espacios y con baja densidad de población (como Argentina, Australia, Brasil, Canadá y Chile) podrían (y deberían) dedicar áreas geográficas para acomodar tales poblaciones migratorias, en paralelo con procesos livianos de inclusión, tomando como modelo las políticas de inmigración positiva de países como Australia y Canadá.

4.2. Planificar migraciones internas (en particular para la agricultura)

Aunque el cambio climático promete principalmente un clima más caótico, algunas tendencias ya se pueden observar, y particularmente la extensión de la zona "caliente" alrededor del ecuador, y las migraciones de los animales hacia las cimas de la montaña, siguiendo la migración geográfica de sus nichos ecológicos en términos térmicos. En eso los países con un largo rango de latitudes (ej. Argentina, Australia, Brasil, Canadá, Chile, Estados Unidos) tienen un ventaja intrínseca: mover las culturas de acuerdo a los cambios climáticos es un problema interno (al contrario de países como los de Europa). No obstante, un cambio como este se debe planificar de manera centralizada, y anticipada: dejar que una "mano invisible" del "mercado libre" lo arregle en un entorno ya caótico sería demasiado ineficiente y costoso (en dinero como en vidas humanas).

4.3. Prepararse para después de la crisis

Para terminar, es importante entender que una gran parte de los desafíos actuales de la humanidad son consecuencias directas de un modelo de desarrollo adoptado en los últimos 50 a 200 años, y no de la existencia general de la humanidad en sí misma (ej. estudios muy conservadores estiman que solamente el 25% de la población humana es responsable de la contaminación que está afectando a la totalidad del planeta, y otros culpan a una proporción mucho mas pequeña aún). Si parece difícil convencer por completo a la proporción de la humanidad responsable de cambiar su comportamiento (ej. modelo de desarrollo económico y social), cuyas élites están preparadas para proteger su posición a todo precio, hay que guardar en mente que este comportamiento en sí mismo contiene las raíces de su derrota. Así, el cambio no solamente es posible, es ineluctable, y será mucho más fácil alterar su trayectoria que lo sería iniciar un tal cambio en sí mismo.