texto
de Pedro Mata
Me da miedo quererte. Es mi amor tan violento
que yo mismo me asusto de mi modo de amar;
de tal forma me espanta mi propio pensamiento
que hay noches que no quiero dormir por no soñar.
No sé lo que me pasa. Pero hay veces que siento
unos irresistibles deseos de matar:
respiro olor de sangre y luego me arrepiento
y me entran unas ganas muy grandes de llorar.
¡Oh, si en esos momentos pudiera contemplarte
dormida entre mis brazos!..., si pusiera besarte
como nunca hombre alguno a una mujer besó...
después, rodear tu cuello con un cordón de seda
y apretar bien el nudo, ¡para que nadie pueda
poner los labios donde feliz los puse yo!