Decisión económicamente racional

Se considera habitualmente que una decisión es económicamente racional cuando se efectúa con el criterio de maximizar y optimizar la diferencia entre los ingresos o beneficios y los costos o sacrificios. Este concepto, para tener validez universal, debiera considerar entre los costos y los beneficios, todos los aspectos humanos, culturales, sociales y naturales sobre los que tienen impacto las decisiones económicas. La racionalidad económica consiste básicamente en la maximización y optimización de los beneficios con la mínima pérdida o deterioro de los recursos empleados. Este resultado uede ser obtenido con diferentes formas organizativas, de modo que no existe una sino varias y diversas racionalidades económicas.