texto
de Salvador Reyes
Mar, yo hermano de la Costa te formulo mi promesa:
Elogiaré tus maravillas y tus fuerzas,
ayudaré a mis hermanos y a cualquier navegante en peligro;
serviré a tripulantes y navíos;
proclamaré que el vivir sobre tus aguas
significa la prosperidad de los pueblos
y la alegría de los hombres.
Te consagraré mis mejores momentos
y obedeceré a tu constante lección de belleza y libertad.
Seré fiel contigo, con mis hermanos
y con todos los hombres que se han consagrado a ti,
Mar soberano.
Guardaré siempre tu imagen y semejanza,
para defender la libertad en todo momento
y hasta la muerte.